Shownotes
Él tuvo temor; y Josafat humilló su rostro para consultar a Jehová, e hizo pregonar ayuno a todo Judá.
2 Crónicas 20:3
Estar preparado para las crisis
Josafat, rey de Judá, estaba siendo atacado por un enorme ejército y solo podía acudir a Aquel que está sentado en su trono en los cielos (véase Sal. 11:4). Su respuesta ante esta crisis puede ayudarnos a enfrentarnos a los problemas que podemos enfrentar en la actualidad.
Josafat “humilló su rostro para consultar a Jehová”, es decir, buscó a Dios en oración. Del mismo modo, cuando nos enfrentamos a dificultades, lo mejor que podemos hacer es clamar a nuestro Padre. Como hijos de Dios, podemos estar seguros de que él nos ama y se preocupa de cada detalle de nuestras vidas. A través de la cruz y gracias a la resurrección de Cristo, quienes hemos puesto nuestra confianza en el Señor Jesucristo hemos entrado en una nueva relación con Dios, que ahora es nuestro Padre. Dios también ha enviado al Espíritu Santo para que more en nosotros como evidencia de nuestra salvación y para que esté siempre con nosotros. Se interesa en cada aspecto de nuestra vida y promete escuchar todas nuestras oraciones.
Josafat estaba preparado para esta crisis porque había desarrollado el hábito de buscar a Jehová en diversas situaciones. Si queremos estar preparados para lo inesperado, entonces debemos disciplinarnos para buscar a Dios diariamente, reconociendo tanto su señorío como nuestra dependencia de él. Josafat temía a Dios, lo que significa que lo honraba y lo ponía en primer lugar. También estuvo dispuesto a negarse a sí mismo al ayunar, y lo hizo todo en unidad con el pueblo.
En tiempos de crisis, podemos intentar solucionar las cosas por nuestra cuenta o invocar el nombre del Señor, y esta última opción es la solución. Al examinar nuestros hábitos y nuestra forma de pensar, podemos saber si nuestra atención está en el Señor o en otras cosas. Si comenzamos nuestro día pensando en él en lugar de nuestros propios planes, y leemos y aplicamos regularmente las Escrituras, entonces demostramos un corazón que teme al Señor y está dispuesto a buscarlo. Esta es la mejor forma de estar preparados para las crisis que sobrevienen a nuestras vidas.
Tim Hadley, Sr.