Shownotes
El Señor recrimina a los sumos sacerdotes y ancianos del pueblo mediante una parábola en la que un padre envía a sus hijos a trabajar al campo; el hijo que cumplió el mandato del padre es similar a los que creen y ven con los ojos del corazón. Evangelio de San Mateo, capítulo XXI, versículos del 28 al 32.
Cápsulas para meditar sobre el Evangelio del día, con Alexander Zatyrka, SJ.